Tierrra llamando a Rabassa 25


Ahora sí perdí la originalidad... pero resulta que un día salía de mi casa y vi a esta doña de frente, así de grandotota... me metí por el tripie y la cámara y me puse a hacer clicks... me gusta, y no tuve que ir tan lejos para encontrarla. Ayer recibí un mensaje y me sentí tan bien con esa última parte del mismo, con tres palabritas, que decidí recuperar esta foto. Me gusta porque más allá de la ciudad donde esté, de lo lejano o cerca que me encuentre de casa, del idioma que esté escuchando en esa cena, de los rostros que vea, del estado de ánimo, doña luna siempre aparece majestuosa y ayuda a evocar tantas cosas, a iluminar caminos oscuros, a recordar... Hoy Luna se apareció justo al final del mes, ojalá sea buen presagio para lo que resta del camino hacia el siguiente destino.

Comentarios

De locura