Cuestión de sumar y restar

Ja ja ja. La foto puede tener diversas interpretaciones. Una: la señora era la abuelita del monito este pintado de verde y se trataba de la hora de corte, así que él tenía que rendirle cuentas y caerse con el gasto, y ella, quisquillosa, contó peso sobre peso, bueno, en este caso, euro sobre euro, para dejar en paz al nieto. Dos: El tipo verdecito le debía una lana a la doña y llegó la hora de cobrar, y él trataba de convencerla de que el día no había sido bueno y que lo comprobara con las pocas monedas que le habían caído en sus manos hasta ese momento. Tres: la doña sólo llevaba una moneda de dos euros, pero como el perfomance del monito de verde la había complacido tanto, decidió darle uno de esos dos euros al actor, y lo único que hacia era tomar su cambio de la mano del verdecito. Lo que sea, sucedió en Las Ramblas y me causó muchísima gracia. Fueron varios segundos los que la señora estuvo contando monedas en la mano del tipo; luego, siguió su camino al mercado. Es una postal que me encanta y que me hace recordar cuán entretenida es la ciudad donde se ha quedado un cachote de mi corazón.

Comentarios

De locura