Rickshaws

Seguramente los vi primero en alguna película. Pero cuando realmente supe de la veracidad de su existencia, fue gracias al libro La Ciudad de la Alegría, que se terminó de escribir en 1985. Para saber más de ellos, de cómo viven, de cómo es su difícil vida, hay que leer ese libro. Para corroborarlo, para entristecerse porque todavía existen, hay que ir a Calcula. Estos hombres transportan de todo en sus rickshaws, increíblemente, también personas. Sonríen por necesidad, es decir, cuando te ofreecen su servicio. Es difícil ver turistas que los usen, pero es fácil ver locales que sí lo hagan. En el libro citado, las descripciones sobre lo duro de su trabajo abundan. No necesité más que las siguientes fotos para darme cuenta de ello. De las ciudades indias en las que estuvimos, sólo fue en Calcuta donde vimos esta inhumana forma de transporte. En las demás, es común ver lo que en México llamamos bicitaxis, pero en Calcuta ellos son parte del escenario y la mejor muestra de lo que es esta ciudad. Lean la Ciudad de la Alegría por favor. 











Comentarios

De locura